Cuando me metieron en el trullo viví una dura experiencia. Tenía un amo ,el poli que guardaba las llaves de mi humilde kely. Intente quitarle las llaves con diversos métodos pero no pude .
Lo único que conseguía era llevarme un poco más de comida a la celda,en los bolsillos.Pero eso no hace falta que lo digas en el juicio. Conseguí llevarme una cucharilla de plástico del bueno a mi celda y empecé a construir un túnel subterráneo que llevaba a todos los Zaras de Madrid. Tardé unos dos o tres días (por sí te lo preguntabas ,sí soy vasca).Antes de mi huida me despedí de mis compis de celda , Yoli y Maribeni para los amigos la chori. Fue duro pero la tentación de Zara era aún mayor.
Elegí uno de mis establecimientos favoritos , el de Gran Vía-Callao. Fue un largo trayecto por el túnel, pero por suerte llevaba las reservas de la comida del trullo.Por cierto sabía a colchoneta sucia, mojada y vieja.bueno llegué y me hice pasar por dependienta ( no preguntes cómo conseguí el uniforme, esa es otra movida)
Ahora mi amo era el dueño de Zara , un tío majo.Pero yo quería más y le envenené en una de sus cenas de peces gordos, para llegar a lo más alto.
El dueño, ya moribundo, tenía que elegir a su sucesora y amañando las elecciones en las que votaban todas y cada una de los mujeres adictas a las compras y a Zara,de Madrid pude llegar a lo más alto.
Ahora solo estábamos ZARA&YO
